En la actualidad, se cuenta con evidencia muy escasa que no permite establecer el principal mecanismo de acción detrás del curso fisiopatológico de COVID-19 en el sistema gastrointestinal y hepatobiliar. Así, los estudios revisados en este reporte breve, sumado a lo que se conoce hasta la fecha sobre la patogénesis en general de la enfermedad, sugieren que lo más probable es que el daño visto en los órganos de los sistemas gastrointestinal y hepatobiliar sea multifactorial y resultado de una sinergia dada entre los efectos directos del virus, de la respuesta inflamatoria, efectos de los medicamentos usados durante la enfermedad, y los daños establecidos por las comorbilidades subyacentes.